Momentos humanos

Josefa Arroyo

Lucía llora. Su físico ajado no hace justicia a sus 46 años. Lucía llora mientras confiesa \«No podía ni limpiar el plato y el vaso de la comida, pero yo me esforcé, nos dicen que tenemos que luchar»\. Ella que siempre ha tenido su casa como los chorros del oro.
Lucía vive sola, está realizando la travesía de la dura enfermedad sola.
Son momentos humanos que nos invitan a confidencias cada 21 días, mientras la quimio atraviesa nuestra piel y fluye por nuestras venas destruyendo lo que encuentra en su camino. También se lleva nuestras defensas y energía, pero no nuestra esperanza y nuestra lucha.